La nueva forma de consumir contenido ha dado paso a la necesidad de incluir un sistema de sonido extra en nuestros salones. El formato más recurrente en nuestros días es la barra de sonido, un sistema de audio compacto y alargado, de ahí su nombre. Esta se compone de varios altavoces, cada uno de ellos encargados de mejorar las frecuencias agudas, graves o medias, según le corresponda y con diferente orientación. Así pues, la barra de sonido es capaz de alcanzar un sonido envolvente y realista.